Si tú me dices ven lo dejo todo... pero dime ven

Cuando tuve este libro por primera vez en mis manos fue para regalárselo a mi hermana (ella lo quería desde hace tiempo). La verdad es que me llamó la atención el bosque y el niño de la portada, es preciosa; también la dedicatoria me encantó: ''Dedicada a todos los que siguen queriendo ser diferentes y luchan contra aquellos que desean que seamos iguales''. Con respecto al libro en sí...bueno, la lectura se hace rápida pero, sinceramente, no creo que sea un libro con razón de ser top ventas. Es decir, no me parece que Albert escriba buenos libros; pero claro, tampoco es que haya leído todos sus libros. En cambio, si tuviera que decir algo bueno de él es que me gustan sus películas.
Este libro me ha decepcionado, lo peor es que mi tía me advirtió.
El libro pasa de flashbacks a realidad, capítulo a capítulo. No tiene una trama muy concreta, te va contando unas especies de enseñanzas en vez de la historia en sí. Aunque hay que admitirlo, me han encantado esas lecciones.
Aunque sea brevemente, este libro te enseña a parar mundos.

Respondiendo un poco a los demás comentarios: sí, es fácil de leer, pero da la impresión de que no acaba ninguna frase. Siempre pone tres puntos y las deja a media. Me he leído tres de Albert Espinosa, y siempre me ha dado la misma impresión.
La historia: entretenida.

No ha sido lo que esperaba, aun que ha sido fácil de leerle. La trama me ha dejado con dudas.

Libro maravilloso, mediante el cual navegas por diferentes historias en la búsqueda de una misma ilusión. Ejemplo de superación, libro muy recomendado.

Directo, sencillo de leer, muy ameno, y con reflexiones muy buenas. ¡Lo recomiendo!

Se trata de una novela muy sencilla y fácil de leer, pero con unas metáforas ocultas que si te paras un poco son grandes reflexiones dignas de ser leídas. La estructura del libro permite que éste sea leído en muy poco tiempo (yo lo hice en una tarde), con lo cual no se os hará eterno. En definitiva, un buen libro de reflexión para un domingo lluvioso.

Un gran libro, como siempre Albert deja retazos de su maravillosa forma de ver la vida, mediante los diálogos y pensamientos del protagonista.