Envidia

A ojos de la mayoría de los jóvenes aristócratas de Manhattan, Penélope Hayes y Henry Schoonmaker son la pareja perfecta, pero, en realidad, su matrimonio está muy lejos de ser feliz: Henry sigue perdidamente enamorado de Diana, y Penélope —presa de los celos— ha amenazado con arruinar la reputación de la pequeña de las Holland si él no empieza a comportarse como un marido ejemplar. Mientras tanto, un poco más al sur de la Gran Manzana, Elizabeth sigue de luto por la muerte de Will, y su ausencia en algunos actos públicos ya ha empezado a dar que hablar. Ahora no son pocos los que aseguran que tras los muros de la ostentosa mansión del número 17 de Gramercy Park nada es lo que parece...