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La voz del maestro
La voz del maestro habla en tono sentencioso e impresionante del triunfo de la fe sobre el dolor, y del amor sobre la soledad. El autor trata temas tan importantes y vitales como "la divinidad del hombre", "la razón y el conocimiento", "el amor y la igualdad", y lo hace en forma tal, que proporciona una nueva visión interior sobre muchos de los enigmas de la vida, cuya respuesta angustia a la mayoría de los hombres.
Gibrán quiere participar a todo hombre su propia convicción profunda sobre sí mismo y sobre la realidad. Su visión positiva, llena de dignidad y de frescura de pensamiento y de palabra es en gran manera estimulante: "He venido -declara- para vivir en la gloria del Amor y en la luz de la Hermosura, que son destellos e Dios. Heme aquí, gozando de la vida, y sin pode ser desterrado de sus dominios, porque mediante mi palabra viva, yo sobreviviré a la muerte."
La voz del maestro no es sólo una filosofía alentadora y una concepción positiva de la vida del hombre sobre la Tierra. Es además una obra maestra de literatura con delicioso sabor oriental, con virtud luminosa y balsámica, reposante...
Abrir sus páginas equivale a desear leerlas todas, y al mismo tiempo a querer detenerse en cada una para saborear a placer el fondo y la forma de cada uno de sus conceptos.
Gibrán quiere participar a todo hombre su propia convicción profunda sobre sí mismo y sobre la realidad. Su visión positiva, llena de dignidad y de frescura de pensamiento y de palabra es en gran manera estimulante: "He venido -declara- para vivir en la gloria del Amor y en la luz de la Hermosura, que son destellos e Dios. Heme aquí, gozando de la vida, y sin pode ser desterrado de sus dominios, porque mediante mi palabra viva, yo sobreviviré a la muerte."
La voz del maestro no es sólo una filosofía alentadora y una concepción positiva de la vida del hombre sobre la Tierra. Es además una obra maestra de literatura con delicioso sabor oriental, con virtud luminosa y balsámica, reposante...
Abrir sus páginas equivale a desear leerlas todas, y al mismo tiempo a querer detenerse en cada una para saborear a placer el fondo y la forma de cada uno de sus conceptos.
- Nº PÁGS 155
- AÑO 1958
- EDITORIAL Diana
Libro sin críticas