A un hombre concretamente no le podías decir cobarde, era una de las palabras que el hombre no aceptaba en su vocabulario
El corazón y la mente nunca han ido juntas de la mano. El corazón, es el impulso de las emociones. La mente, la razón de las acciones frías. Cada humano tiene la virtud de elegir. Luchar por lo que más anhela tu corazón o dejarlo en el olvido de tu mente frívola.