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El Periquillo Sarniento
Es la primera novela hispanoamericana y se inscribe en la tradición del "Lazarillo de Tormes" y "El diablo cojuelo". Narrada en primera persona cuenta la historia de un pícaro en su lecho de muerte. Estilo sencilo lleno de digresiones morales, a través de los cuales pasa repaso a las formas morales, religiosas, de educación y de hipocresía.
Recuerdo que lo leí cuando estaba en la secundaria, comenzaba con la lectura.
Una de las obras más importantes de la literatura en castellano y considerada "la primera novela de América"; esas son razones más que suficientes para entrar de lleno en las andanzas del pícaro Pedro Sarmiento, pero "El Periquillo" es más que eso.
La eterna lucha entre el vicio y la virtud, a través de un personaje, su tiempo y sus circunstancias. En esta lucha cabe de todo: momentos hilarantes, personajes entrañables, homenajes velados (y no tanto) a otros clásicos de los que, se nota claramente, Fernández de Lizardi era fan, etc., etc.
Los lectores debemos meternos en esta historia de cabeza y sin red. Debemos entrar sin juzgar lo incisiva que puede llegar a ser en su cometido moralizador. Debemos leer sus páginas sin juzgar aspectos de la mentalidad de la época, porque, aviso, hay muchas cosas que nos chocarán profundamente. Si llegamos a "El Periquillo Sarniento" con la mente abierta, disfrutaremos enormemente las aventuras de este "nini" del México colonial y nos sorprenderemos de la cantidad de reflexiones, puntos de vista y situaciones que parece que ni el paso del tiempo, ni la geografía, han logrado cambiar, mejorar, o por lo menos, mover de sitio.
Un libro imprescindible.