Crítica de FAUSTO › Caligula

EL PODER DE LO IMPOSIBLE

Camus toma el personaje histórico de Calígula, especialmente por su locura, para hacerle partícipe del sentimiento del absurdo. Esta sensación se apodera de él, convirtiéndole en un defensor de una idea: conseguir lo imposible; una de las imágenes que simbolizan esta actitud: el deseo de apoderarse de la luna. Este idealismo tiene sus raíces en la incomprensión y el rechazo de la vida tal como es. El mundo no es soportable ante la infelicidad de los hombres y su mortalidad, y pretende lograr, mediante el poder casi absoluto desde su puesto de César, lo utópico, lo inalcanzable.

Es un pensamiento revolucionario, una nueva lógica para la vida que consiste en tener la libertad total, aún a costa de los demás. La crítica y repulsión ante todo lo establecido: moral, sociedad, política, amor y religión, hacen que Calígula tome decisiones descabelladas, a cual más cruel e incoherente para sus súbditos y allegados.

Hay 3 grupos de personas que “rodean” al personaje principal: los patricios, temerosos por sus intereses particulares y siempre es el blanco de las brutalidades del emperador; los que están a su lado por diferentes motivos: amor o mejor trato; y por último hay 2 personajes que entienden sus “visiones”, pero uno teme estas ideas, pues está conforme en el mundo tal como lo conocemos, y el otro siente igual que él, pero no aprueba sus métodos.

Es una obra sobre el sufrimiento humano, la libertad, el amor, la maldad y la moral.