Ramón Rocha Monroy
Hijo de Sixto Rocha y Carmela Monroy, al nacer se le dio por muerto. Muchos años después, el escritor relataría este hecho en un libro y en una entrevista de 2012 decía: "Mi relación con la muerte es muy temprana y la conté en un libro que publicó la editorial El País, La cueva y la intemperie. Confidencias del Ojo de Vidrio, porque yo nací muerto. Es un hecho. Me sacaron como pudieron para salvar a mi madre, que estaba en estado de coma, y a mí me botaron al basurero, técnicamente muerto. Felizmente mi tía Maruja se preocupó por mí. Entró, vio a mi madre en estado de coma y preguntó por el niño. Fue la única que se preocupó. Yo estaba botado en el basurero, me escuchó y tenía todavía el “tic tac”. Gracias a ella vivo. Yo pienso que en ese estado inicial, de la mayor indefensión posible, me agarré a puñetes con la muerte y le gané.